domingo, 15 de febrero de 2009

El Castañero de la Selva Peruana

II Parte

Como les iba contando en mi primera parte sobre la vida del hombre Castañero de la Selva Peruana, exactamente el hombre que se dedica a la extracción de la castaña en la parte sur-oriente del Perú, en las enmarañadas selva del Departamento de Madre de Dios, es decir en toda la región de Madre de Dios, a distancias muy profundas de su selva existen centros castañeros.

Recuerdo cierta vez, nuestro amigo Carlitos y su familia juntamente con seis obreros, lo que hacían un total de quince pesonas incluído el motorista, enrumbaron provistos de víveres, herramientas y accesorios para su centro castañero, aproximadamente en el mes de febrero del año dosmil dos, porque como les dije las castañas empiezan a caer desde el mes de diciembre a marzo, y en ésa época del caido del fruto uno no se puede acercar mucho a los árboles de castaña.

Resulta, que después de ocho días río arriba por el río Piedras y luego por el Pariamarca, donde por familia y más de cuarenta años ellos conservaban su centro castañero de trescientas cincuenta hectáreas y con más de ciento veinte árboles en producción, lo que arroja normalmente en época de buena producción unas doscientas cincuenta a trescientas barricas de castaña.

Mi amigo Carlitos como cariñosamente lo llámabamos por su carisma de tratar con las personas, es una persona muy tranquila y apreciada por todos los que lo conocemos. Como todo hombre de campo y con un nivel educativo muy bajo (segundo grado de primaria) sobre todo que no pudo continuar sus estudios porque era una mano de trabajo más para su familia, que por cierto también sus padres fueron castañeros. Carlitos por la amistad que teníamos y la confianza, nos invitó muy cordialmente para ir a trabajar dentro de su fundo castañero, puesto que él no se abastecía para poder extraer toda la castaña que producían sus ciento veinte árboles en producción, sin contar los demás árboles que ya también se iban incorporando a los que producían.

Mi persona, que me considero una mujer emprendedora, arriesgada y aventurera en éste tipo de episodios, organicé mi viaje hacia el fundo San Juan como se llamaba, habilitádome de víveres, herramientas, enseres, combustibles y todo lo necesario, mi carabana consistía de siete personas en total incluyendo al motorista que también hace de castañero en el campo.

Todo fué muy emocionante y sobre todo muy atractivo, puesto que aprovechando el período vacacional de los alumnos, podía hacer algo en incrementar mis ingresos para mi hogar, así lo pensé y así lo planifiqué. Sin embargo, fue muy decepcionante, que al llegar al lugar de los hechos, es decir al fundo "San Juan" de propiedad de mi amigo Carlitos y que por más de cuarenta años le había pertenecido a la familia, muchos de sus árboles de castaña estaban derribados, es decir el maldito extractor forestal, disculpen por utilizar ese calificativo, pero sinceramente el más grande enemigo no solo del castañero sino de todo el mundo es el Extractor Forestal, que no le importa acabar con nuestro planeta tierra, no le importa exterminar lo poco de naturaleza que nos queda, no le importa en martar el pulmón del mundo que es nuestra selva Peruana, al extractor forestal lo único que le interesa es llenarse el bolsillo a como dé lugar, y hacersde de dinero lo más rápido posible, sin importar que de por medio esta la vida humana.

Así es querid@s amig@s, el rostro de Carlitos, sus familiares y todos los que le acompañábamos era muy triste, expresaba una indignación tan grande que yo llegué a pensar si los hubiéramos encontrado a los extractores forestales aún sacando la madera de la castaña, nos hubiéramos enfrentado cuerpo a cuerpo y vida a vida; porque sinceramente no sé como se le puede calificar a ése tipo de personas que teniendo conocimiento pleno que los árboles de castaña son una riqueza muy valiosa no solo para el castañero y su familia que depende de ellos, sino para toda la humanidad, porque para que un árbol de castaña produzca tienen que pasar más de veinte años, y muchos de ésos árboles tienen más de ochenta o cien años, y me pregunto: ¿ cómo es posible que existan personas tan indolentes, que nos les importe la vida del planeta?, y es así queridos amigos, cuando nos percatamos de tal atrocidad lo primero que hicimos fué un inventario forestal, puesto que ésos árboles de castaña están en estradas quiere decir conectados cada árbol uno a otro através de trochas que año tras año se conservan.

En mi siguiente artículo les contaré más detalle sobre el hombre Castañero, su forma de trabajo, el proceso de la Castaña y su comercialización.

Continuará....

Otra vez muchas gracias. Su amiga de Siempre, Candela.

El Chullachaqui, Hombrecito Misterioso de la Selva Peruanau

DE VUELTA A CASA

Ya, habían transcurrido más de cuareta y cinco días que habíamos salido de Puerto Maldonado, rumbo a tomar los puntos de referencia del Centro Castañero río arriba por el Piedras, supuestamente deberíamos estar de retorno a los veinte o veintidos días, porque se suponía que el viaje de surcada dbería de demorar de once a doce días y el de retorno de sesis días, es decir en motor Peque-Peque a base de gasolina, y dos días de trabajo de campo en el monte ubicando los puntos con el GPS, o la Brújula, entonces estaba suficiente tiempo de veinte a veintidos días, lo extraño fué que pasaron quince días y unos madereros que bajaban con una carga de madera encontraron nuestra canoa abandona y dieron parte a la policía suponiendo que nos habían asesinado o secuestrado los nativos de la selva que por cierto aún existen muchas tribus canívales y urañas, cuando ven a las personas se asustan y atacan en afán de defensa propia.

Así fué, del día dieciseis al día treinta nos mandaron buscar por agua y aire, en los botes de la Marina de Guerra del Perú, y en la avionetas de FAP, al no encontrar rastros de nosotros, nos dieron por desaparecidos y entonces nuestros familiares velaron nuestras ropas, todos nuestros seres queridos lloraron nuestras muertes aunque alguno de ellos no se resignaban a que hubiéramos desaparecido.

Al vernos llegar a nuestro querido Puerto Maldonado, el asombro para nuestras familias, fue grande, no lo podían creer, recuerdo que mis padres, mis hermanos, me tocaban cada rato como para verificar si realmente yo era y esta ahí con ellos, a una de mis cuñadas por la emosión se desmayó creía que había vuelto del más allá, no lo podían creer, estábamos nuevamente en casa, yo abrazé fuertemente a mis padres y hermanos y a todos los que venían a saludarme, amigos, vecinos, comadres en fin era un desfile sin parar los primeros días. Todos querían que les narre mi historia, de nuestros amiguitos Los Chullachaquis, trataba de ser lo más resumida posible como ahora lo estoy haciendo, porque sinceramente tengo muchos detalles que aún me faltan describirlos y contarles a ustedes querid@ amig@s, espero algún día poder compartir mucho más sobre nuestros hermanos Los Chullachaquis.

La prensa, los medios de comunicación, periodistas, de las radios, de las televisiones, de los periódicos llegaban a mi casa para entrevistarme y me pedían detalles muchos detalles, pero yo estaba un poco agotada y cansada por el viaje que traté de informarles lo necesario y bien resumido.

Al día siguiente de nuestra llegada a nuestro querido Puerto Maldonado, aparecieron grandes titulares ente ellos: Volvieron a la vida, Los Chullachaquis rescataron a jóvenes perdidos, El Milagro de los Chullachaquis, Están vivos gracias a los Chullachaquis, entre otros, y considero que si fueron justos, porque ahora estoy frente a la máquina vida escribiendo estas líneas es gracias a su buena acción de nuestros amiguitos Los Chullachaquis, nosotros los seis viajeros perdidos, le debemos la vida a los Chullachaquis.

El misterio de los Chullachaquis, aquí no termina, si quieren conocer más detalles, donde viven, como viven, que hacen, cómo son realmente? entre otras curiosidades, escríbanme, gustusamente les contaré más cosas.

Continuará......

Cuentos que sí son Cuentos Reales, expresa su sincero agradecimiento y estaré a la espera de sus comentarios, muchísimas gracias.

Su amiga de siempre. Candela.

El Chullachaqui, Hombrecito Misterioso de la Selva Peruana

LA DESPEDIDA

Llego el momento de la Despedida, todo estaba listo, nuestra hermosa balsa constrída a base de topa amarradas con soga de Tarzán, y sus seis hermosos remos tallados con una perfección única, en nuestra balsa habían acomodado provisiones para nuestro viaje de retorno a Puerto Maldonado, nos habían preparado plátano asado, yuca asada, picuro asado, pescado en paichipango, y los verdaderos juanes en hoja de vijao a base de pavas de monte, en fin teníamos comida como para los días necesarios de retorno a nuestro querido Puerto.

Dos veces en la vida recuerdo que me dolió el corazón, cuando lo operaban a mi hijito de doce años en una operación muy complicada, y al despedirme de mis amiguitos Los Chullachaquis, este cuento, romperá las barreras de todo lo feo y malo que se ha dicho de los Chullachaquis mal llamados, yo que he convivido con ellos después de casi un mes, puedo decir y afirmar que los Chullachaquis, no son esos seres malvados, fantasmas, envidiosos, asesinos y que se comen a las gentes, que los roban a los seres humanos y nos los devuelven, que se comen sus almas de las personas, que son agresivos, soy hija de Madre de Dios, hija de la Selva Peruana, y sé que muchos escritores y poetas incluso algunos de mis paisamos han descrito a los Chullachaquis como los seres más despreciables de la tierra, todo eso es mentira, si quieren conocer más detalles de los Chullachaquis, escríbanme y se los diré, lo cierto es que los Chullachaquis son seres pequeños, con una patita de venado y otra de humano, con una carita como las de los muñequitos chuqui o los extraterrestres pero con una alma y un corazón muy grande y dulce, son seres muy amables, buenos, justos, colaboradores, sensibles, etc...., éstos pequeños seres tienen muchas virtudes que a muchos de nosotros los seres humanos nos falta.

Conocer al Mundo de los Chullachaquis, ha hecho un gran cambio positivo en mi, yo he cambiado pero para bien, me he despercudido de muchos defectos que tenía, porque sinceramente de ellos he aprendido mucho y en su mundo tan pequeño nos han dado grandes lecciones.

Tenía que llegar el momento de la despedida, y aunque fue doloroso y triste, tuvimos que enfrentarnos a la despedida, como les repito la aoperación de mi hijo mayor y la despedida de mis amiguitos Chullachaquis fueron los dos más grandes dolores que he sentido hasta el momento.

Nos aberazamos uno a uno, bañados en lágrimas, empapatos en sudor, parecía que empezaba una gran tormenta pero en cada uno de nosotros, tuvimos que llenarnos de valor y subir a nuestra hermosa balsa y cada uno cogimos nuestro hermoso remo, que hasta el día de hoy lo conservo en mi casa, es una reliquia, porque es lo único material que conservo de ellos. Así se dió la despedida entre abrazos y sollozos, todos llorábamos y llorábamos, como si nunca más nos volveríamos a ver, pero les confieso algo, yo si abrigo la esperanza de algún regresar donde mis amiguitos Los Chullachaquis.

Pregunto: ¿algién desea conocer el mundo mágico de los Chullachaquis?, derrepente podemos armar una expedición e irnos a visitarlos, sería grandioso, los estaré esperando.

Así emprendimos nuestro viaje de retorno, río abajo, por todo el río Piedra, luego el colorado y al final el río Madre de Dios, fueron recuerdo diez días de remada sin parar y al fin llegamos a nuestro querido Puerto Maldonado.

Han pasado ya más de veinte años de este lindo episodio y aún los recuerdo muy claramente a la ciudad de los Chullachaquis.

¿Qué pasó al llegar a Puerto Maldonado?, ¿ Quieren saber cómo nos recibieron?

continuará....

Su amiga de siempre. Candela.